Título: Slumdog Millionaire
Género: Drama/Romance
Director: Danny Boyle
Guión: Simon Beaufoy
Duración: 102 minutos
Nacionalidad: Inglesa
Año de producción: 2008
Estreno: 13/02/2009 en España
Intérpretes: Dev Patel, Anil Kapoor, Freida Pinto, Irrfan Khan, Madhur Mittal
Esta película, rodada íntegramente en la India, cuenta la difícil historia de Jamal Malik, un niño pobre de los suburbios de Dharavi, en Bombay, que participa en la versión india del concurso televisivo mundialmente conocido ¿Quién quiere ser millonario?. Malik sorprende a la audiencia y a los organizadores del programa al llegar a la última pregunta -optando a un premio de 20 millones de rupias-, lo que provoca su detención por sospecha de fraude. En la comisaría explica cómo todas y cada una de las preguntas hechas están relacionadas con algo sucedido en su vida, alternándose escenas del concurso con las historias que le hacen recordar la respuesta.
La complejidad del film se encuentra en la combinación de tres tiempos narrativos: el presente (el interrogatorio a Jamal), el pasado inmediato (la participación en el concurso) y los flashbacks (infancia y juventud). Este montaje hace que la atención no decaiga en todo el tiempo que dura la película.
Boyle compone un puzzle caótico sólo en apariencia (detrás de cada respuesta del concurso existe una historia) mezclando diferentes emociones dirigidas a mantener al espectador en un constante estado de expectación gracias a la acción del concurso y a los diferentes flashbacks que nos desvelan su historia junto a su hermano Salim. Estos dos niños tratan de sobrevivir en los tristes arrabales de Bombay después de perder a su madre. El mismo día que quedan huérfanos, los hermanos conocen a la pequeña Latika, también huérfana, de quien Jamal quedará prendado el resto de su vida, dispuesto a hacer todo lo posible para reencontrarla en más de una ocasión.
Podemos destacar la extraordinaria fotografía y una banda sonora original y acertada, (ha ganado los Oscar de mejor fotografía y mejor banda sonora) además de unos actores de rostros desconocidos a los que no se les puede reprochar su interpretación. También hay que mencionar momentos con matices cómicos (véase la escena de Jamal niño en el lavabo). Pero lo más importante es que la película contagia la emoción y consigue una gran empatía con el protagonista.
Al final, la película (que podría ser la historia real de un indio) acaba con un final idílico que contrasta con todo el pasado de Jamal; que puede llevar a dos reflexiones. La primera es que el director ha querido hacer una oda a la vida y al amor, creyendo en la esperanza de que todo es posible. La segunda es que la película no ha podido escaparse de un forzado happy ending, rompiendo así con la verosimilitud de la historia y con la crudeza de los hechos.
Tampoco han podido evitar hacer un guiño al cine bollywodiense, como se puede ver en el baile final de los créditos del film, baile prescindible ya que no aporta nada a la historia y la película no es de género musical.
Hay que destacar también que el director, cuando estaba preparando la filmación, decidió traducir un tercio del diálogo en hindi.
Lo que no se puede negar es que es una película bien hecha y una de las más premiadas del año: ganadora de ocho Oscar (entre ellos mejor película y mejor director), cuatro Globos de Oro y siete premios Bafta.
Beatriz Marcos Audí
Boyle compone un puzzle caótico sólo en apariencia (detrás de cada respuesta del concurso existe una historia) mezclando diferentes emociones dirigidas a mantener al espectador en un constante estado de expectación gracias a la acción del concurso y a los diferentes flashbacks que nos desvelan su historia junto a su hermano Salim. Estos dos niños tratan de sobrevivir en los tristes arrabales de Bombay después de perder a su madre. El mismo día que quedan huérfanos, los hermanos conocen a la pequeña Latika, también huérfana, de quien Jamal quedará prendado el resto de su vida, dispuesto a hacer todo lo posible para reencontrarla en más de una ocasión.
Podemos destacar la extraordinaria fotografía y una banda sonora original y acertada, (ha ganado los Oscar de mejor fotografía y mejor banda sonora) además de unos actores de rostros desconocidos a los que no se les puede reprochar su interpretación. También hay que mencionar momentos con matices cómicos (véase la escena de Jamal niño en el lavabo). Pero lo más importante es que la película contagia la emoción y consigue una gran empatía con el protagonista.
Al final, la película (que podría ser la historia real de un indio) acaba con un final idílico que contrasta con todo el pasado de Jamal; que puede llevar a dos reflexiones. La primera es que el director ha querido hacer una oda a la vida y al amor, creyendo en la esperanza de que todo es posible. La segunda es que la película no ha podido escaparse de un forzado happy ending, rompiendo así con la verosimilitud de la historia y con la crudeza de los hechos.
Tampoco han podido evitar hacer un guiño al cine bollywodiense, como se puede ver en el baile final de los créditos del film, baile prescindible ya que no aporta nada a la historia y la película no es de género musical.
Hay que destacar también que el director, cuando estaba preparando la filmación, decidió traducir un tercio del diálogo en hindi.
Lo que no se puede negar es que es una película bien hecha y una de las más premiadas del año: ganadora de ocho Oscar (entre ellos mejor película y mejor director), cuatro Globos de Oro y siete premios Bafta.
Beatriz Marcos Audí
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